Rugby: FODA de garantía de construcción en estos tiempos
Redacción AC
«Los rugbiers no nos miramos de arriba a abajo; nos miramos adentro»
Siempre hemos dicho quienes amamos este deporte y sus enseñanzas que, en cada rincón del mundo, los rugbiers «conectamos» de una forma increíble.
Corren tiempos en donde el sálvese quien pueda, es la norma, donde las ideologías están modificando el mundo, sus sociedades y habitantes, y siento que, hasta ahora, afortunadamente, sin mayores selecciones de clase social o actividad el rugby nos une.
Es fantástico que no nos miramos de arriba a abajo; nos miramos adentro, no hay postureo, hay contenido y fortalezas comunes, ya que no solo sabemos detectar las debilidades y amenazas, sino que también hacemos una buena utilización de las oportunidades y potenciamos nuestras fortalezas.
No hay que preguntar este FODA como utilizarlo, pues como una guía aplicable a todos los escenarios, muy a pesar de lo viejo de este sistema de evaluación, y al respecto el Rugby, sigue intacto para su aplicación, tanto en el juego en sí, como en la aplicación de por vida de sus resultados.
Nada que cambiar
Por eso hago hincapié en que la tradición, es garantía, parafraseo mí slogan; «las modas pasan, los estilos perduran» hoy este espacio común que compartimos está todavía intacto en un alto porcentaje, muy a pesar de aquellos que, mitad postureo, mitad negocio quieren aprovechar este espacio impoluto.
Pero ya el solo hecho de querer usarlo significa que no solo están fuera, por querer aprovecharse de él, sino que también los que estamos dentro, tenemos un olfato muy agudo para detectar a los plebeyos oportunistas.
Hemos construido una forma de ser a base de sacrificio, disciplina, compañerismo, solidaridad, exigencia, decencia y buena conducta, eso nos hace diferentes y singulares según nuestra humilde opinión, y no por ser grandes personajes, sino por sensibles a conectar con gentes y una forma de ser.
Hago un llamamiento a consolidar esta conducta y filosofía de vida, unirnos, no decaer, no transar, no vender nuestro corazón al maligno, y conectarnos cada vez más, ya que el acceso a este club exclusivo de los rugbiers lo hemos ganado a fuerza de huevos.
Aquí a disposición de todos aquellos que deseen sumar, construir y crecer, con los valores que conocemos.